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jueves, 11 de octubre de 2012

RESTAURAR:


Cuando las aguas se ponen turbias, es que la mente es la que se ha puesto turbia.

He dado algunas vueltas durante estos últimos meses por la cuestión del estado social, mejor dicho por el caos social-mental que los nuevos dioses del abismo ejercen sobre las masas. Claro que decir nuevos, es solo decir que su actual investidura es nueva, puesto que todo obedece a ciclos, incluso "los dioses".

Así tenemos que el Vaticano, desea recuperar poder sobre fieles intentando que otras iglesias queden bajo su filiación; los temores oscuros de algunos proyectan su sombra sobre mitos extraterrestres y "secuaces" iluminati; los escasos Iluminati que andan por ahí, tratan de establecer una supuesta filiación con Rockefeller, algo muy dudoso, su fundador se vuelve rabino y se dedica a otra cosa; y lo realmente preocupante fuera de estas simples cuestiones, lo verdaderamente preocupante es, nuestra dependencia como reses entregadas a la tecnología y a la manipulación de mercado tecnológica-capitalista-financiera, solo falta que comiencen a reemplazar partes nuestras por partes tecnologicas y nos terminen conectando a una computadora central para volvernos obedientes esclavos
al estilo de los Borg de "Viaje a las Estrellas".

Así es la cosa, piercing hasta en el clítoris y celulares hasta en el baño, es el comienzo de que nos terminen un día cromando galvanicamente como el logo de Mercedes Benz, y se nos satine la superficie para dejarnos símil tapizado.
Así se empieza auriculares, piercing, móviles, chips.....

Je je, en fin, ¿no digan que no ven una proyección a futuro sobre eso?
No es difícil, con el grado de ingenuidad actual nos venden cucarachas por caviar.
Ah, si, y las pagamos, y nos volvemos adictos, y vivimos para eso encerrados en la maquinaria, tragados por ella, sin escape, mecanizandonos cada ves mas
y creyéndonos libres al encerrarnos en nuestra cueva, cada ves mas encerrados, creyendonos libres, paranoicos, si temiendo la inseguridad, ladrones,
temiendo que nos quiten nuestro dinero o nos maten o maten a los nuestros,
si, enfermos de temor, reclamando seguridad, para poder seguir adictos
programas sin espíritu en una pantalla, nosotros encogiendo nuestra alma, hasta que ya no nos queda ni el carozo.

Si, el ser humano se ofrece gratis a ser poseído por los dioses
que luchan entre si a través de humanos, y de quien tanto ha odiado a la humanidad que se propuso reducirla a cosas, y la humanidad gustosa se entrega.

Días raros se avecinan, mas raros que los que estamos viviendo.
Nunca antes se había densificado tanto nuestra especie, y un rayo que retumba en los cielos, anuncia la vuelta del Restaurador, pronto.

Alex

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